El presidente de Consecomercio, Fernando Morgado, alertó ayer en rueda de prensa que hay áreas del comercio y los servicios que reportan caídas "brutales" durante el primer semestre de este año.
Tal es el caso del sector automotriz, cuya caída se estima en 60%. Añadió que hay renglones como la hotelería y turismo donde la situación es desastrosa, "los hoteles están relativamente vacíos, están haciendo un esfuerzo sobrenatural para mantener su personal".
Reiteró que en lo que va de año, el consumo ha caído 6%.
El año pasado, el sector del comercio y los servicios creció 3%, pero al cierre de 2009 se espera un decrecimiento de 3%, es decir, una caída de 6%.
"Este semestre (junio a diciembre) va a ser más fuerte que el anterior". Al respecto, señaló que "si el Gobierno mostrara síntomas que generaran confianza, posiblemente esas cifras mejorarían".
Inventarios chucutos. Según Morgado, en este momento no se puede hablar de desabastecimiento en el sector comercial; "pero es una realidad que el consumidor no consigue todo en un mismo lugar, tiene que ir a varios establecimientos comerciales para comprar lo que necesita y eso es, definitivamente, un alerta".
Usó como ejemplo los comerciantes de la isla de Margarita, "los que se arriesgaron importando con dinero permuta ahora los tildan de ladrones y los que no se atrevieron ya no tienen inventarios".
Indicó que esta situación ha disparado los precios de muchos bienes y servicios. "El producto más caro es el que no se consigue; ya el consumidor no pregunta cuánto cuesta algo, si ve lo que busca lo compra y paga lo que sea por tenerlo".
Poca credibilidad. Morgado dijo que las cifras del Gobierno carecen de credibilidad, lo que ha generado una crisis de confianza y desinversión. "¿Quién se cree que la inflación está en 11% o que el desempleo es de 7%?". Recalcó que "ya no importan las cifras que emita el Gobierno".
Informó que muchos comerciantes, al no poder cumplir con los tributos y compromisos legales, han optado por cerrar el negocio y operar en la informalidad.
"Hemos alertado esto al Gobierno y le hemos propuesto trabajar en forma conjunta para formalizar a los informales y evitar lo que está ocurriendo, porque va a llegar el momento en que vamos a ser un país de puros buhoneros".
Gabriela Iribarren/ Ultimas Noticias
Tal es el caso del sector automotriz, cuya caída se estima en 60%. Añadió que hay renglones como la hotelería y turismo donde la situación es desastrosa, "los hoteles están relativamente vacíos, están haciendo un esfuerzo sobrenatural para mantener su personal".
Reiteró que en lo que va de año, el consumo ha caído 6%.
El año pasado, el sector del comercio y los servicios creció 3%, pero al cierre de 2009 se espera un decrecimiento de 3%, es decir, una caída de 6%.
"Este semestre (junio a diciembre) va a ser más fuerte que el anterior". Al respecto, señaló que "si el Gobierno mostrara síntomas que generaran confianza, posiblemente esas cifras mejorarían".
Inventarios chucutos. Según Morgado, en este momento no se puede hablar de desabastecimiento en el sector comercial; "pero es una realidad que el consumidor no consigue todo en un mismo lugar, tiene que ir a varios establecimientos comerciales para comprar lo que necesita y eso es, definitivamente, un alerta".
Usó como ejemplo los comerciantes de la isla de Margarita, "los que se arriesgaron importando con dinero permuta ahora los tildan de ladrones y los que no se atrevieron ya no tienen inventarios".
Indicó que esta situación ha disparado los precios de muchos bienes y servicios. "El producto más caro es el que no se consigue; ya el consumidor no pregunta cuánto cuesta algo, si ve lo que busca lo compra y paga lo que sea por tenerlo".
Poca credibilidad. Morgado dijo que las cifras del Gobierno carecen de credibilidad, lo que ha generado una crisis de confianza y desinversión. "¿Quién se cree que la inflación está en 11% o que el desempleo es de 7%?". Recalcó que "ya no importan las cifras que emita el Gobierno".
Informó que muchos comerciantes, al no poder cumplir con los tributos y compromisos legales, han optado por cerrar el negocio y operar en la informalidad.
"Hemos alertado esto al Gobierno y le hemos propuesto trabajar en forma conjunta para formalizar a los informales y evitar lo que está ocurriendo, porque va a llegar el momento en que vamos a ser un país de puros buhoneros".
Gabriela Iribarren/ Ultimas Noticias
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